Analistas calificaron de «sólido» y «robusto» el alza del 3,7% de la actividad económica chilena en agosto.
Luego de que el Banco Central informara esta mañana el sorpresivo Imacec de agosto, en el que se dio cuenta de que la economía local se expandió un 3,7% en comparación al mismo mes de 2018, cifra muy por encima de lo estimado por el mercado, los analistas ven posible que el país pueda alcanzar la tasa de crecimiento de 2,5% -de acuerdo a la proyección del ente rector- en 2019.
Para ello, señalaron desde Banchile Inversiones, «se requiere que el crecimiento en los meses que restan de 2019 sea, en promedio, 3,3%», recalcando que el Imacec de agosto se situó «por sobre las expectativas del consenso del mercado que apuntaba a un 2,9%».
En tanto, según los analistas de Scotiabank, el Imacec de agosto reveló la «verídica fortaleza» de la actividad económica del país a través de «un sólido 3,7% a/a con un relevante crecimiento de 0,9% m/m, sorprendiendo al consenso y empujado por construcción y servicios». Con esto, añadieron, «nuestro escenario más probable apunta a una expansión del PIB de 2,7% para el 2019. Para el 2020 estamos tranquilos con una expansión del 3,2% que podría ser incluso mayor, particularmente en la primera parte del próximo año».
Por su parte, César Guzmán, de Security, apuntó que «el Imacec de agosto fue bastante mejor a lo previsto, y no solo por el buen desempeño de la minería -que se expandió un 5,3%-, sino que los servicios han continuado apuntalando la actividad». «Lo anterior, ratifica que la economía tendrá un mejor segundo semestre que el primero, y que el PIB cerraría el año entre 2,5% y 3%. No obstante, con la carencia de un impulso externo, es difícil que tengamos una reactivación significativa para lo que queda del año y con miras a 2020», agregó. Mientras que el análisis de Santander se inclinó por mantener su proyección de crecimiento de 2,4% para este año.
«Sin embargo, dada la sorpresa positiva del mes (de agosto), estimamos que los riesgos de revisiones adicionales a la baja han disminuido considerablemente». De acuerdo al pronóstico de Itaú, y considerando el «robusto registro» de Imacec de agosto, el crecimiento del PIB 2019 «podría superar» su proyección de 2,2% que tiene para este año. De todas formas, la entidad financiera sostuvo que, pese a la «sorpresa» de agosto, «la incierta perspectiva para la actividad se mantiene junto con la expectativa de que la inflación de siempre (tradicionalmente alta) sea baja».
¿Y qué se espera para septiembre?
Desde Santander proyectan que «después de una fuerte aceleración de sectores no mineros, es probable que en septiembre la actividad haya moderado su velocidad en el margen. Con ello, proyectamos un Imacec de entre 3,5% y 4%». Soctiabank, en tanto, es más optimista, señalando que «la expansión desestacionalizada de 0,9% m/m, deja la tarea muy fácil para que septiembre presente una expansión entre 4% y 4,5% a/a, incluso con velocidad de 0% m/m para la actividad no minera». Mientras que Itaú expuso que «el registro de crecimiento de septiembre probablemente sea el máximo del año, cercano al 4%».
Y sobre cómo reaccionaría el Banco Central, los analistas se dividen respecto a un posible recorte de la tasa de interés de política monetaria en la próxima reunión de octubre, la cual actualmente se encuentra en 2,0%, luego del recorte de 50 puntos base durante el encuentro de septiembre. Por ejemplo, Scotiabank indicó que «vemos altamente probable un recorte de la TPM ahora en octubre, de 25 puntos base, para dar consistencia al escenario base planteado en el IPoM. Sin embargo, vemos con menor probabilidad un nuevo recorte de la tasa hasta 1,5%, pues aquello requeriría que empeore el escenario externo (aspecto que se está dando), pero en conjunto con un deterioro de la actividad e inflación local.
Estos últimos, por ahora, van en la dirección contraria». 3,7%fue la expansión de la economía en agosto, el crecimiento más alto desde octubre de 2018Según Itaú, pese a la «sorpresa» de agosto, «la incierta perspectiva de la actividad se mantiene, junto con la expectativa de que la inflación de septiembre (tradicionalmente alta) sea baja. (Por lo tanto) el Banco Central probablemente continuaría incrementando el estímulo (monetario) en su reunión de octubre, con un recorte de 25 puntos base».
Y Guzmán, de Security, dijo que de materializarse un deterioro adicional del panorama global, «podrían venir nuevos ajustes en la TPM». En contraste, Santander estima que «si la economía sigue dando muestras de fortaleza, el proceso de recortes quedaría suspendido este año y la TPM cerraría en 2%». De todas formas, agregó, «si el próximo Imacec sorprende a la baja, si los registros inflacionarios se mantienen acotados o si aumenta el riesgo del escenario externo, es posible que haya un recorte adicional en diciembre».
Fuente: El Mercurio